Wino el artesano - Historia de un expandillero
Wino (Ronald, su nombre real) se gana la vida haciendo pulseras, aretes y collares en una de las esquinas frente al Monumento al Mar. Lleva cuatro años así, luego de quedar inválido en una balacera con miembros de una pandilla rival. Después de pasar penurias limpiando parabrisas y pidiendo frente a la universidad nacional, encontró un grupo de rehabilitación donde le dieron habitación, ropa, comida y un par de consejos. Con un capital semilla se consiguió una bolsada de mostacilla, piedras blancas e hilo naylon. Ahí fue cuando comenzó a elaborar y a vender sus materiales, y ya lleva así un buen tiempo así. Todas las tardes baja por la mencionada avenida y cruza sobre la calle Arce, hasta llegar atrás de la Basílica del Sagrado Corazón de Jesús, frente a La Casa de la Cultura del centro. Wino es lo que podría llamarse un buen tipo. Sus arreglos oscilan entre $2 a $5. Esto le alcanza para pagar el hospedaje, comida, ropa y comprar materia prima. Al final de la jornada asiste a un culto...